Honduras fue durante la década del ochenta el patio trasero Norteamericano por donde la administración Reagan basaba la política contrarrevolucionaria contra los Sandinistas reclutando, armando y fomentando a los contras Nicaragüenses con activa presencia impidiendo el nacimiento de movimientos que siguieran o apoyasen el ejemplo de Nicaragua.
Por lo tanto la derecha hondureña gobernó el pequeño país centro americano los ultimos 30años de acuerdo a los dogmas y postulados económicos de los Chicago Boys cuya primera y nefasta incursión en Latinoamérica se dio durante la Sangrienta dictadura de Pinochet en Chile.
El 28 de Junio en Tegucigalpa se monto una parodia totalmente orquestada por este mencionado grupo que le demostró al mundo una nueva forma de golpe de estado nunca antes vista por estos lares.
El golpe de estado cívico militar amparado por el congreso hondureño fundamentado en supuestas denuncias de corrupción del Presidente constitucionalmente elegido en 2006 Manuel Zelaya .Lo que los Gopistas con estas denuncias quisieron esconder el verdadero motivo del alzamiento que fue el giro a la izquierda que el Gobierno de Zelaya pretendía llevar acabo tratando de incorporar a su país en el pacto andino junto con Evo Morales y Chávez. O sea que la oligarquía hondureña cuando sintió que ya el poder no pasaba por ellos llevaron a cabo este experimento que es un peligroso caso testigo en Latinoamérica que puede servir de musa inspiradora para algunas mentes un poco alteradas (cualquier similitud con la Mesa de enlace no es pura coincidencia).
La derecha Argentina trato por todos los medios de descalificar las gestiones del gobierno nacional que unido a los mandatarios de la Unasur busca reestablecer el gobierno legitimo en el país centroamericano. Las infortunadas declaraciones del “tatuado” De Narváez o de Mauricio haciendo referencia a que este era un problema interno hondureño seguidas por la de la ganadora del Martín Fierro de platino Chiqui Legrand que fervorosamente en sus almuerzos decía”que me importa Honduras” pasaban casi desapercibidas en la prensa Nacional. La tibia pero bienvenida respuesta de los Estados Unidos de quitarles las visas a todos los miembros del gobierno golpista y cancelar los acuerdos bilaterales de venta de armas dejo en Off Side a los Cruzados derechistas vernáculos que quedaron un poco descolocados y se llamaron a silencio.
El Audaz y solidario gesto del presidente del Brasil de permitir el alojamiento del presidente constitucional derrocado en la sede diplomatica Brasilera desato una terrible represión a los civiles partidarios del orden democrático en Tegucigalpa llevándolos detenidos a estadios de Béisbol y de fútbol imitando la Abominable táctica que práctico el Dictador de chile Augusto Pinochet en el año 73. También se busco un recurso tristemente usado por aquel dictador el toque de queda. Solo falto el suicidio de Zelaya que el mismo se encargo de denunciar a las radios del mundo “ Me quieren suicidar” fue la desesperada alocucion del depuesto presidente.
La comunidad internacional debería apoyar mas que nunca a el presidente Lula e instar a los golpistas a no ingresar en la embajada Brasilera que es territorio soberano del mencionado país según el derecho internacional obligando mas enérgicamente a los Golpistas a entregar el poder al presidente Constitucional elegido por la mayoría de los hondureños.
Micheletti el Presidente de facto no es otra cosa que un dictador entonces, por que los periodistas de TN en vez de referirse a esta persona como “El presidente de Honduras” no dicen el “Dictador Hondureño”
No sera todo un estilo ¿no?
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